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Bypass Gástrico

Durante varias décadas, el “bypass” gástrico fue la cirugía más popular dentro de las opciones quirúrgicas para el tratamiento de la obesidad y su comorbilidades. Actualmente sigue siendo considerada como la operación bariátrica estándar contra la cual se comparan el resto de los procedimientos. 

Es una operación sumamente segura que permite alcanzar una pronunciada pérdida de peso y que goza de un efecto especialmente efectivo en cuanto al control de la diabetes mellitus se refiere. El procedimiento se lleva a cabo por laparoscopia, es decir, mediante pequeños orificios en la pared abdominal a través de los cuales introducimos los instrumentos con los cuales es llevada a cabo la operación. La técnica mínimamente invasiva (laparoscópica) permite que la cirugía se lleve a cabo en una manera altamente eficaz, minimizando el trauma y la manipulación de los tejidos. Esto se traduce en una recuperación más rápida, con menor dolor y un mejor resultado cosmético para el paciente. De igual manera se reduce el riesgo de algunas complicaciones postoperatorias, como las infecciones y hernias de las incisiones quirúrgicas. Esta técnica por lo general permite que el paciente pueda deambular y volver a una vida activa con mayor facilidad y en un periodo de tiempo menor al habitual, disminuyendo, de esta manera, el riesgo de trombosis y otras complicaciones significativas.

La operación se lleva a cabo de la siguiente manera:

  • Se lleva a cabo la formación de un nuevo y pequeño estómago, con una capacidad aproximada de 30 cc. En esta etapa, el nuevo estómago es un pequeño bolsillo sin salida o continuidad con el resto del aparato digestivo. 
  • Se divide el intestino delgado a varios centímetros de su porción inicial. 
  • El cabo intestinal distal que resulta de esta división se eleva y se une al pequeño bolsillo gástrico, restableciendo de esta manera la continuidad gastrointestinal. 
  • Se cierran los espacios resultantes de la reconfiguración intestinal y se prueban las uniones para demostrar su integridad y permeabilidad. 

¿Cuáles son los beneficios asociados al "bypass" gástrico?

  • Con el “bypass” gástrico, se puede esperar perder alrededor de un 70 a 80% del exceso de peso. 
  • Es uno de los procedimientos más poderosos para el tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2. La mayor parte de los pacientes alcanzan una cura total o una remisión parcial en el largo plazo, la mayor parte del restante experimenta una mejoría significativa. 
  • Además de la diabetes mellitus, muchas otras enfermedades asociadas a la obesidad pueden remitir de manera total o parcial. Entre ellas se encuentran: migraña, hipertensión, dislipidemia, asma, pseudotumor cerebri, incontinencia urinaria de estrés, gota, dolores articulares y de espalda, hígado graso, apnea del sueño, reflujo gastroesofágico, insuficiencia venosa (várices), síndrome de ovario poliquísticos, entre muchas otras. 
  • El 95% de los pacientes reportan una mejoría significativa en su calidad de vida. 
  • Potencial mejoría en cuanto a la fertilidad. 
  • Se ganan años de vida (reducción del 89% de la mortalidad a 5 años, entre 8 y 13 años de ganancia en años de vida). 
  • Disminuye importantemente el riesgo cardiovascular (infartos y otras enfermedades). 
  • Por lo general hay una mejoría o resolución de la depresión y otros aspectos psico-sociales, como la autoestima, cambios en la auto percepción de la imagen corporal, etc. 
  • Una amplia gama de otros beneficios. 

¿De qué manera actúa esta operación sobre la obesidad y sus enfermedades?

  • Por vía restrictiva: al disminuir la capacidad del estómago, se reduce de manera importante la cantidad de alimento que se puede consumir, de manera que el paciente que se somete a esta operación, únicamente puede consumir porciones muy pequeñas de alimento, alcanzando una sensación de saciedad total muy rápidamente. 
  • Por vía malabsortiva: al reconfigurar la anatomía intestinal, los alimentos que habitualmente se desdoblan y procesan en un estómago intacto y la primera porción del intestino, no entran en contacto con las enzimas producidas por éstos órganos hasta que han alcanzado una porción muy distal del aparato digestivo y por tanto los nutrientes y las calorías de lo que se consume no pueden ser absorbidas y aprovechadas en su totalidad, ya que el proceso digestivo se acorta. 
  • Por vía hormonal: el estómago y el intestino son órganos complejos que llevan a cabo distintas funciones. Entre ellas, se encuentra la capacidad de liberar hormonas que regulan diversos aspectos metabólicos y digestivos. Al crear el pequeño “bolsillo” gástrico, gran parte del estómago queda parcialmente excluido de su función digestiva. En consecuencia, una hormona; la grelina, que se produce principalmente en esta región, disminuye importantemente sus concentraciones. Esta hormona es una de las responsables de generar la sensación de apetito. De esta manera, el paciente no solamente no puede consumir grandes porciones, sino que además, no siente el deseo de hacerlo, lo que facilita en gran medida la pérdida de peso. Otras hormonas como el PYY, CKK, GIP, GLP-1, leptina, adiponectina, entre otras, también ven su participación modificada debido a la reconfiguración intestinal. Algunas de estas sustancias son las responsables de la mejoría tan temprana y radical que se observa en la diabetes después de someterse a un “bypass” gástrico. 
  • Otros mecanismos: existen otras vías por las cuales el paciente postoperado de “bypass” gástrico, pierde peso y mejoran las enfermedades asociadas al mismo. Entre ellos se puede contar el cambio en las preferencias alimenticias, la supresión del apetito vía el sistema nervioso central, el cambio en la flora bacteriana intestinal, entre muchos otros. 

¿Qué se puede esperar del procedimiento y la estancia hospitalaria?

  • La cirugía se lleva a cabo por vía laparoscópica y dura en promedio 2 a 3 horas. 
  • El dolor postoperatorio por lo general no es significativo y se controla adecuadamente con analgésicos de uso común. 
  • Se inicia con líquidos orales al día siguiente de la cirugía. 
  •  El total de estancia hospitalaria es de una noche en promedio 
  • El paciente puede deambular desde el día mismo de la cirugía. 
  • Por lo general, es posible volver a las actividades cotidianas dentro de los primeros 7 a 10 días después del procedimiento.